Entre protección e irritación: ¿qué contienen sus productos de cuidado?
Los productos cosméticos nos acompañan todos los días, ya sea crema, champú o maquillaje. Pero mucha gente no se da cuenta de ello: Sin Conservantes muchos de estos productos difícilmente serían duraderos. Al mismo tiempo, son precisamente estos aditivos los que suelen causar inseguridad, sobre todo en las pieles sensibles. En este artículo, descubrirá qué Conservantes cosméticos se consideran seguras, cuáles se discuten críticamente y en qué debe fijarse realmente a la hora de comprar.
¿Por qué necesitan conservantes los cosméticos?
Los productos de cuidado contienen agua y, por tanto, son el caldo de cultivo ideal para bacterias, mohos y levaduras. Los conservantes impiden que los microorganismos se multipliquen en su crema favorita y le protegen así de irritaciones o infecciones cutáneas.
Objetivos de los conservantes:
- Prolongación de la vida útil
- Protección contra la contaminación
- Garantizar un uso higiénico
- Estabilidad del producto durante semanas y meses
Conservantes de uso frecuente en cosmética
✅ Sustancias comunes y en gran medida inofensivas:
- Fenoxietanol - Bien tolerado en dosis bajas
- Sorbato de potasio (sorbato potásico) - también se utiliza en la alimentación
- Benzoato sódico (benzoato de sodio) - Presente de forma natural en las frutas
- Ácido deshidroacético - Conservante suave permitido en cosmética natural
- Alcohol bencílico - Componente de los aceites esenciales, autorizado en cosmética natural
⚠️ Conservantes discutidos críticamente:
- Parabenos (por ejemplo, metilparabeno, propilparabeno)
→ Sospecha de efecto hormonal, parcialmente restringido en la UE. - Liberadores de formaldehído (por ejemplo, DMDM hidantoína, imidazolidinil urea)
→ Irritante y potencialmente alergénico - Isotiazolinonas (por ejemplo, metilisotiazolinona, MIT)
→ Alta potencia alergénica, normalmente prohibida en productos sin enjuague.
Cosmética natural y conservación: ¿es posible sin?
Los cosméticos naturales no contienen muchos conservantes sintéticos, sino que utilizan alternativas como:
- Aceites esenciales con efecto antimicrobiano (por ejemplo, romero, árbol del té)
- Alcohol en pequeñas dosis (por ejemplo, bioetanol)
- Extractos de plantas fermentadas
- Envases herméticos (por ejemplo, dispensadores airless) para reducir la contaminación por gérmenes.
Importante: Los cosméticos naturales también deben conservarse, de lo contrario sólo durarían unos días.
En qué debe fijarse al comprar
🔍 Compruebe la lista INCI
Etiquetados como "sin parabenos" o "sin conservantes" no siempre son claros. Preste atención a los ingredientes específicos.
🧪 Certificaciones de uso
Sellos como COSMOS, NATRUE o BDIH ayudan a reconocer los productos compatibles y probados.
⏳ Tenga en cuenta la vida útil
Los productos con un símbolo PAO corto (por ejemplo, "6M") deben consumirse rápidamente tras su apertura.
👩🔬 Observar irritaciones
No todos los conservantes son malos per se, pero la piel reacciona de forma individual. Si experimenta una sensación de quemazón o erupción cutánea: deje de utilizar el producto.
Conclusión: Conservantes cosméticos: sensatos, pero con sentido de la proporción
Los conservantes son esenciales para que los cosméticos sean seguros y duraderos. El reto reside en la cantidad adecuada y la selección de sustancias respetuosas con la piel. Si se presta atención a la calidad, se leen las listas INCI y se utilizan marcas certificadas, no hay que tener miedo a los conservantes: se puede disfrutar del cuidado de la piel de forma consciente y segura.